Cairns es el punto de partida más popular para ir a la Gran Barrera de Coral, en la que seres vivos vienen construyendo una obra maravillosa hace 300 millones de años, cuando los dinosaurios estaban comenzando a gobernar la tierra. A las espaldas y al oriente de Cairns existen bosques de especies tropicales de hojas enormes, fósiles vivientes -un Jurassic Park verde-. En ambos lugares el viajero puede asomarse a un bello mundo todavía inexplicable, avanzando sobre las aguas, bajo el Mar de Coral, volando en aviones anfibios o en teleféricos sobre la selva. Un sueño de vacaciones y de aventuras para los amantes de la exploración y aventuras. Como dato histórico la princesa Diana y Carlos vivieron su luna de miel en Cairns.
Cairns, pertenece a Queensland, un estado australiano ubicado al Noreste. Es una ciudad meramente turística, recibe anualmente a más de 200 mil turistas.
En Cairns puedes visitar: la Gran Barrera de Coral; Green Island; Osprey; Scuba Zoo; los Fósiles vivientes (Jurassic Park); Wild World Tropical Zoo; Atherton; Port Douglas; Lizard Island; el Cairns Museum, entre otros.
Cairns tiene costa con fondo marino bajo y arena de calidad, que las aves marinas disfrutan, pero no la gente. Pero hay que salir muy poco de la ciudad encontrar ocho playas soleadas y buenas para el baño, con arenas blancas. Debemos avanzar en dirección norte, alejándonos un poco más de la ya lejana Sydney, hasta Port Douglas, que se encuentra a unos 60 km. Junto a cada playa encontraremos villas, hoteles, restaurantes.
Una de las mejores playas es Trinity, pero antes se halla Machans, que no está nada de mal. El mejor sitio para el baño es Palm Cove, a 25 minutos de Cairns, con buena hotelería y paseos a la Gran Barrera que salen de su muelle. Cubren los mismos destinos que los ofrecidos en Cairns, pero en un ambiente más relajado. (La ciudad tiene un original zoológico nocturno, el Night Zoo, donde podremos tomar koalas en los brazos, dar de comer a los canguros y fotografiar cocodrilos soñolientos).
Si puede, visite el Angsana Resort & Spa, en Veivers Road, un cinco estrellas situado entre arrecifes y selva. Todo un privilegio. Y tiene que ir, sin falta a su enorme playa, que por algo se llama Four Miles. Hay espacios para todas las tranquilidades y todas las locuras, a veces sin traje de baño, donde hay muchas palmeras y a veces sobra el viento. En Cairns funcionan buenos restaurantes no demasiado enmantelados, es decir, a la australiana.
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En la calle más movida de la ciudad de Cairns, The Esplanade, hay tiendas de recuerdos y algunas de calidad en otros rubros, en medio de muchos locales de comida rápida, restaurantes de comida pausada y agencias de viaje. Cairns es, básicamente, una ciudad turística de paso o base para excursiones, y para compras de emergencia.
Como los viajes son normalmente largos, a veces será necesario pagar por un baño en un camping. Existe la alternativa gratuita en las estaciones de gasonlinas. Todas disponen de duchas y lavatorios para uso público. Podemos encontrar distancias de 600 kilómetros sin combustible, y más de 1.000 de una ciudad a otra. Hablamos del centro del país, que permanece poco habitado, pues es desierto o abundan haciendas enormes. Por lo tanto, las gasolineras deben ser nuestros lugares de parada obligatoria si andamos por nuestra cuenta.