Washington DC.- Los legisladores respondieron al llamado del presidente Joe Biden para suspender el impuesto a la gasolina con escepticismo mientras el presidente intenta combatir los precios casi récord de la gasolina en todo Estados Unidos.
El miércoles, Biden instó al Congreso a suspender el impuesto a la gasolina del gobierno durante tres meses, que es de 18 centavos para la gasolina regular y 24 centavos para el diesel. También llamó a los estados a suspender sus respectivos impuestos a la gasolina. Los estados, en promedio, cobran un impuesto a la gasolina de 31 centavos por galón.
“Cuando observa los problemas con los altos precios de la gasolina, tenemos un problema de demanda”, dijo Chuck Grassley, republicano de Iowa. “Y la propuesta que están escuchando de la Casa Blanca trata el problema de la demanda. Tenemos un problema de suministro que hay que solucionar”.
“Quiero obtener más datos sobre si este tipo de ahorro realmente se transferiría a los consumidores”, dijo el senador Mark Warner, demócrata de Virginia.
“He visto a otros estados hacer esto, pero no creo que los datos reflejen que los consumidores se benefician. Entiendo que la gente está sufriendo por el alto precio de la gasolina y el presidente tiene que usar todas las herramientas de su caja de herramientas”.
Los comentarios de los senadores muestran que el plan de Joe Biden enfrenta muchas dificultades para ser promulgado.
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La Casa Blanca estima que la eliminación del impuesto a la gasolina provocaría una caída de $10 mil millones en los ingresos del Highway Trust Fund.
La administración Biden dijo que debido a una caída de $1.6 billones en el déficit, el gobierno puede permitirse suspender el impuesto a la gasolina mientras usa otros ingresos para completar el Fondo Fiduciario de Carreteras.
Joe Biden instó a la industria petrolera a transferir los ahorros a los consumidores.
“Estoy haciendo mi parte. Quiero que el Congreso, los estados y la industria también hagan su parte”, dijo.