Washington DC.- La reacción no se hizo esperar después de que la Corte Suprema de Estados Unidos decidiera anular Roe v. Wade, que legalizaba los abortos en todo el país.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, condenó la decisión.
“Hoy, la Corte Suprema controlada por los republicanos ha logrado el objetivo oscuro y extremo del Partido Republicano de arrebatarles el derecho de las mujeres a tomar sus propias decisiones sobre salud reproductiva”, dijo.
El liderazgo republicano en la Cámara de Representantes emitió una declaración conjunta, elogiando la decisión de dejar las leyes de aborto en manos de los estados.
“Cada niño por nacer es precioso, extraordinario y digno de protección”, dijo la declaración del líder de la minoría de la Cámara Kevin McCarthy, el representante Steve Scalise y la representante Elise Stefanik.
El líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, calificó el viernes como uno de los “días más oscuros” que el país haya visto.
“Estos jueces, designados por republicanos y presidiendo sin rendir cuentas, han robado el derecho fundamental al aborto”, dijo Schumer.
El exvicepresidente Mike Pence, que formó parte de la administración Trump, que nombró a Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett, quienes votaron para anular a Roe, elogió la decisión. “Hoy, La vida ganó”, dijo.
- Deborah Birx describe los planes de Trump para el Covid-19 como confuso al inicio de la crisis
- ¿Cómo hacer el cálculo de pensión alimenticia retroactiva en México?
- Nike sale por completo de Rusia tras suspender operaciones
- ¿Qué es la situación laboral? Qué tipos de situación existen así como ejemplos
- ¿Cómo cancelar una transferencia SPEI desde el Banco HSBC?
El expresidente Barack Obama también ofreció su opinión sobre la revocación de un derecho de 50 años por parte de la corte.
“Relegó la decisión más intensamente personal que alguien puede tomar a los caprichos de políticos e ideólogos, atacando las libertades esenciales de millones de estadounidenses”, dijo.
No fueron solo los estadounidenses los que reaccionaron a la decisión. El primer ministro británico calificó la decisión como un “gran paso hacia atrás”.
