Washington DC.- Si bien todos los ojos están puestos en la variante nueva y poco entendida omicron, la variante delta del coronavirus no ha terminado de causar estragos en los Estados Unidos, que sigue enviando un número récord de pacientes al hospital en algunos estados, especialmente en el Medio Oeste y Nueva Inglaterra.
Estados Unidos registró su primera infección conocida por omicron el miércoles, en una persona completamente vacunada que había regresado a California desde Sudáfrica, donde la variante se identificó por primera vez hace poco más de una semana.
Por ahora, la variante delta extra-contagiosa representa prácticamente todos los casos en los Estados Unidos y continúa causando miseria en un momento en que muchos hospitales luchan con la escasez de enfermeras y la acumulación de pacientes.
Ahora, el temor es que omicron envíe a más pacientes, y quizás a más enfermos, a los hospitales de ciudadanos que no desean vacunarse por confiar en teorías conspitativas.
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