Kiev.- Rusia ha comenzado a evacuar su embajada en Kiev, y Ucrania ahora está instando a sus ciudadanos a abandonar Rusia mientras se prepara para una posible invasión.
Europa y los aliados occidentales ahora se preparan para una mayor confrontación luego de que las tensiones sobre Ucrania aumentaron dramáticamente el martes. El presidente ruso, Vladimir Putin, solicitó y recibió permiso del parlamento para usar la fuerza militar fuera de su país.
Una pregunta clave ahora es si Putin se detendrá en reconocer la independencia de las regiones rebeldes en el este de Ucrania o intentará adentrarse más en el país.
Occidente respondió con una serie de sanciones, casi hundiendo las esperanzas de una salida diplomática de una nueva guerra.
El martes, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, canceló los planes para reunirse con su homólogo ruso en Ginebra a finales de esta semana, mientras Rusia sigue adelante con el reconocimiento de las regiones separatistas de Ucrania.
Blinken dijo a los periodistas que las acciones de Rusia indican que Moscú no se toma en serio un camino diplomático para resolver la crisis. Como resultado, dice, canceló su reunión del jueves con el ministro de Relaciones Exteriores, Sergey Lavrov.
La Casa Blanca ha dicho que sigue abierta a una resolución diplomática del conflicto. Kiev también retiró a su embajador y consideró romper todos los lazos diplomáticos con Moscú.
Docenas de naciones exprimieron aún más a los oligarcas y bancos rusos de los mercados internacionales.
El presidente Joe Biden anunció el martes que Estados Unidos impondría sanciones económicas contra Rusia a las instituciones financieras, la deuda soberana, sanciones a las élites rusas y sus familiares.
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Alemania también detuvo el proceso de certificación del gasoducto Nord Stream 2 de Rusia, un acuerdo masivo y lucrativo buscado durante mucho tiempo por Moscú. El proyecto del oleoducto ha sido criticado durante mucho tiempo por Estados Unidos y algunos países europeos, quienes argumentan que aumenta la dependencia de Europa de los suministros energéticos rusos.
El miércoles, la Casa Blanca dijo en un comunicado que seguiría adelante con las sanciones contra la empresa que estaba construyendo y operando el oleoducto.
«Estos pasos son otra parte de nuestro tramo inicial de sanciones en respuesta a las acciones de Rusia en Ucrania. Como he dejado claro, no dudaremos en tomar más medidas si Rusia continúa escalando», se lee en el comunicado.
