El marketing sensorial o multisensorial como también es utilizado por las empresas donde crean experiencias a través de los sentidos, es decir la vista, tacto, sonido, gusto y olfato. En algunos casos busca la combinación de los mismos para lograr que los clientes pasen un momento tranquilo y de confort en la tienda y así se logre un regreso y preferencia por la marca.
La mayoría de empresas entrenan a los vendedores para que utilicen tácticas de convencimiento racional. En estos casos es natural que un cliente escuche frases como “El precio es mejor, las garantías son mejores”. Pero el marketing sensorial busca cambiar estas conversaciones y apelar a emociones a la hora de visitar una sucursal.
Las organizaciones deben aprender que para muchas personas vale más una experiencia sensorial, en la que se sientan cómodos y los olores, sabores, toquen y hasta lo que escuchen dentro un establecimiento sea atractivo. Esto puede marcar grandes diferencias a la hora de comparar el consumo, índices de repetición de compra y lealtad hacia la empresa.
Es común escuchar la frase “Todo comunica” y la razón de esto es que desde la música que se escucha en un restaurante de comida china va a diferenciar a otro de comida italiana lo importante es que el cliente se sienta cómodo con el ambiente. Algunas organizaciones incluso han logrado que los olores sean parte diferenciadora entre su público.
Lograr una compra satisfactoria será sinónimo de fidelidad con la marca, incluso el boca a boca de las emociones sensoriales que logremos provocar permitirán clientes potenciales. Por ello es importante que a la hora de crear estrategias de mercadeo se incluya el marketing sensorial. Una forma inteligente de hacerlo es aprovechar las nuevas tecnologías para desarrollar una experiencia satisfactoria en los clientes.
